III Jornada de Hermandad entre la Penya Ciclista Dándolo Todo y El Factor Campo BTT Grup. La etapa a la altura de los asistentes, grande!. Desde Porta Coeli hasta casi Alcublas, devorando desniveles a la ida (km 24) y arriesgando en las bajadas en la vuelta, por sendas de diversa tecnicidad.
Una vez más, y ya van tres, celebramos una nueva jornada de Hermandad entre la Penya Ciclista Dándolo Todo y el BTT Grup El Factor Campo. Fue algo improvisado y cocido mediante whassaps mañaneros. Algo sin pensar, que si no... no sale. La jornada tenía varios motivos que la iban a hacer especial. El primero es que Pablo y Motibiker se volvían a juntar después de no sé cuántos meses rodando por separado por la Sierra Calderona, el otro es que ambos se iban a juntar y competir contra los dos representantes de Dándolo Todo, Casero y Caicu. Para que os hagáis una idea, Casero y Caicu son ese par de amigos que tienen las típicas discusiones de pareja entre ellos y siempre están dispuestos a aventuras de este tipo, uno más que el otro.
Con algo de retraso partimos desde la Urbanización de Torre de Porta Coeli. Primeros kilómetros con amenas y entretenidas charlas por el vial de servicio de la CV-333 hasta casi llegar a Olocau. En ese punto nos salimos del asfalto para adentrarnos en pistas paralelas al Canal de los Regantes de Olocau. Transitamos algún kilómetro más pegados al Canal con firme en buen estado para abandonarlo y comenzar la primera subida. No muy larga pero con importante pendiente y firme en mal estado. Las piernas ya calientes de la kilometrada por asfalto y por pista que nos hemos "comido" comienzan a responder y el pelotón se estira. Sin necesidad de un gran alarde físico, Caicu corona, con más gloria que pena, en cabeza del grupo. Arriba primera parada y primeras quejas de algún componente por el ritmo que se empezaba a poner en las primeras posiciones del grupo.
Después de la parada hay que seguir subiendo y será así hasta el kilómetro 26 de la ruta, ecuador del track que marca el fin de las pistas y subidas y da comienzo a la bajada y a las sendas. Ese era nuestro objetivo, el ecuador de la ruta y para ello nos falta mucho desnivel que devorar. Así pues Motibiker se pone en cabeza, a su rueda Caicu, Pablo y Casero que aguantan como pueden. Sin cambios de ritmo pero con un ritmo alto y constante que nos arrojan medias propias de marchas llanas, el pelotón se estira y se estira y vamos ascendiendo hasta que en una larga y prolongada subida de unos 4 kilómetros Pablo intenta su primer demarraje. La táctica de equipo quedó al descubierto: Motibiker puso un ritmo de desgaste y Pablo intentó dar el hachazo aprovechando dicho desgaste. El plan funcionó, se llevó por el camino a Casero y a Motibiker y el único que pudo seguir su rueda fue Caicu.
Coronamos así el primero puerto importante y largo de la jornada. Otra parada para comentar y criticar el alto ritmo al que se estaba rodando.
Desde ahí un fuerte descenso y un corto ascenso nos dejan al pie del Cerro Pedroso, a las puertas de Alcublas, llegando así al ecuador de la ruta. Otra parada donde decidimos desistir de la idea de bajar/subir a Alcublas y ponemos rumbo a Porta Coeli.
Un tramo de pista en bajada produce el pinchanzo de Motibiker que tras girar la rueda varias veces tapona la salida de aire. Listo! El kit sincamaras es un verdadero milagro!
Justo ahora empiza lo bueno y divertido, una serie de sendas, en bajada todas menos una, con afloramientos rocosos que las hacen aún más entretenidas, se iban a suceder a los pies de nuestras cubiertas. El grupo estirado y manteniendo las distancias de seguridad pertinentes transitó por las primeras sendas, al borde de un cortado para adentrarnos en un barranco, el Barranco de las Veinticuatro, con sendas en buen estado y alguna trialera rocosa que sacó el mayor partido a las suspensiones de nuestras bicis. Abría fuego por delante del grupo Motibiker, que parecía flotar sobre las rocas que pisaban las ruedas y volaba literalmente sobre las sendas. El único que le podía seguir la huella era Caicu, que con un gran esfuerzo hacía de enlace entre la cabeza de carrera la cola del pelotón, pendiente siempre de su inseparable Casero.
Se sucedieron varios poblados, algunos abandonados, Torresvell, Torrenou...etc.
Llegamos así hasta la última senda, divertida y entre pinares que nos dejan a los pies de una plantación de narajos con un camino hormigonado en forma de cuneta donde nos encajonamos y volamos a casi 50 km/h. De ahí nos encontramos de nuevo con el Canal de los Regantes y ante un nuevo campo de batalla. Las pocas fuerzas que quedaban deberían de ser reservadas para llanear hasta meta por pistas y caminos asfaltados pero las lanzas seguían en todo lo alto. Motibiker puso un fuerte ritmo y a su rueda como un resorte se pegó Casero y Caicu, a Pablo le pilló por sorpresa tal repentino cambio de ritmo y no pudo coger rueda. Llaneando a gran velocidad y con cambios de ritmo para intentar deshacerse de sus perseguidores, Motibiker llegó en solitario al poblado de Marines, donde una parada de rigor permitió el reagrupamiento de los corredores. Desde ahí hasta la Urbanización de Torre de Porta Coeli se fraguó el último episodio de la batalla. Con el grupo rearmado de nuevo, en el primer repecho de la carretera y último, Motibiker de nuevo quiso probar fuerzas y tal fue el cambio de ritmo que se quedó solo, tomando cada vez más ventaja sobre sus predecesores y a falta de 5 kms para la llegada. Del grupo de atrás saltó Caicu, cual semental jaleado por la plebe, puso toda la carne en el asador y tuvo que darlo todo para alcanzar al escapado que ya saboreaba las mieles del triunfo. A un kilómetro para meta le dio caza, le mantuvo a rueda y a falta de 700 metros otro cambio de ritmo de Motibiker hizo exprimirse a ambos al máximo, hasta llegar a meta con el pulsómetro fuera de los límites humanos.
Al cabo de varios minutos hacen acto de llegada el resto de componentes mientras los primeros ya ocupaban sitio para repostar con bebidas y aperitivos varios y comentar las anéctodas de la jornada ciclista.
Criticado hasta la saciedad fue Motibiker por el alto ritmo al que llevó al grupo desde el principio, y acordándonos todos de lo mucho que hubiera sufrido Pablo (el escocés) por una ruta a tan alto ritmo y encima sin almuerzo en ruta.
La ruta es muy completa aunque para su mayor disfrute se recomienda acortar kilómetros de asfalto tomando las salida desde Olocau o desde la gasolinera abandonada que hay a las afueras del pueblo.
Solo queda poner fecha para el IV Hermanamiendo.
GRANDE MOTIBIKER! excelente crónica como siempre. ya la tenemos colgada en nuestro blog!
ResponderEliminarmotibikerrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr¡
ResponderEliminarCómo ha ido la última aventura?
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