Nueva subida al Sierro o la Ruta del "ya que estamos..."
Varios factores me permitieron disfrutar de tres horas de mtb el domingo pasado. Eso sí, salía pasadas las 11h de la mañana con un sol de justicia y llegaba a comer, a mesa puesta, a las 14h y poco.
La intención era rodar, ya que por el mal tiempo del fin de semana anterior llevaba quince días de parón ciclista. Llevaba tiempo si subir por la Font del Marge y allá me fui. Con los primeros kilómetros entre la boscosa zona del Barranco del Rubio que nos lleva hasta las pistas principales de la Calderona hasta los merenderos de Porta Coeli, entré en calor. Pasé por delante del Monasterio de Porta Coeli, por debajo del acueducto y empecé las primeras rampas de subida hacia la Font del Marge. Decir que esta época del año es ideal para ciclar o simplemente pasear por el monte. Una mezcla de colores y olores estallan ante tus sentidos.
La subida a la Font del Marge la han dejado que parece una pista de un aeropuerto. Antes te costaba mantener el equilibrio en algunos tramos, ahora no. Aunque este hecho no resta dureza a la tarea de ascender hasta el cruce que nos lleva a la Font del Poll superando repechos de entre el 10% y el 15% constantemente y algunos de entre el 22% y el 25%. Antes a ésto le tenías que unir un camino roto y lleno de bolos como el puño. Ahora solo has de centrarte en superar estas pendientes, que no es poco...
Una vez coronado y alcanzada la primera bifurcación del día donde se suponía que debía de poner rumbo de vuelta casa me dije "ya que estamos... nos vamos a la Font del Poll" y allá fuimos. Me crucé con tres Sepronas y una excursión de un colegio o algo así. El tramito entre la bifucarción de la Font del Marge y la Font del Poll se hace sin sentir. Una vez en la Font del Pollo me dije "ya que estamos bajo hacia Serra" y allá me fui.
Bajando hacia Serra pasé por la Prunera y ante la tentación de volver a saborear la dureza de la subida del Sierro me dije "ya que estamos subimos al Sierro" y allá fuimos. Apretando los dientes de nuevo para superar las exigentes rampas de esta subida. Pendientes por encima del 20% en varios tramos y un camino en mal estado aunque mejor que antaño, me hicieron dar lo mejor de sí para conseguir encumbrar sin poner pie a tierra de nuevo. Eso sí, me volví a olvidar del pulsómetro en el tramo difícil. En el resto de la subida logré mantener a raya el equilibrio, las fuerzas y las pulsaciones, que no es poco.
Una vez arriba y ensimismado una vez más por las vista tocaba retirada. Lo más rápido hubiera sido tomar la carretera pero "ya que estamos volvemos por Potrillos". Y así fue, de Potrillos al Monasterio de Porta Coeli y de ahí a la Torre de Porta Coeli. Un tramo donde se disfrutan de varios kilómetros de camino en buen estado, salpicado por tramitos en peor estado y en sentido descendente hasta alcanzar los merenderos.
Al final, 1.000 metros de desnivel acumulado y un IBP muy digno para poco más de tres horas de ruta. Y como no, al ser la primera ruta con un sol de justicia... brazos y piernas quemados por el sol. Y yo tan contento de haber podido disfrutar un día más de algunas de las rampas más endiabladas (Font del Marge y Subida al Sierro) de la Calderona.
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